Wednesday, September 27, 2006

26, veintiséis, vint-i-is, vingt-six, twenty six, vinte e seis, zweiundzwanzig, ventidue

Ja tinc 35!!! Ich bin schon 35!! Ja cheguei aos 35!! J'ai 35 ans!! I'm 35!!! Ya tengo 35!!

Un año más, la confusión sobre el día del cumpleaños... es el 26 de septiembre, a las 3:20 AM exactamente. Como cada año. Esta vez estoy realmente fascinada por constantar casi científicamente que la confusión sobre la fecha es directamente proporcional al número de años que alguien me conoce. Los amigos más antiguos se confunden más. Y por eso no puedo enfadarme...

De hecho, creo que voy a cambiar la fecha y traspasarla a octubre o noviembre, cuando a todos nos hace falta algún motivo de alegría... Este año, al menos, será así. Habrá una fiesta conjunta con Judit, que cumplió en agosto. Qué pasa? Cada cual lo celebra como quiere...

Thursday, September 07, 2006

Sólo un día más....

... y vuelvo a casita!! Hoy se ha acabado el curso, ha ido bastante bien. Está mal que yo lo diga, pero se me da bien dar clases. Me encanta cuando puedo leer en la cara de la gente que acaban de entender algo que antes era desconocido.

En breves momentos me iré a encontrar con mi amiga Najoua, y a cenar un poco bien. Ya que me salto la comida, me merezco una cena decente. Espero que esta noche consiga evitar las pizzas, bocadillos, crêpes y demás cócteles de hidratos de carbono.

Ahorita me estoy tomando una cerveza en el hall del hotel, uno de los pocos sitios donde se puede conseguir zumo de cebada en esta ciudad. Qué ganitas tengo de atracarme de jamón y vino!!!! Siempre se me despierta la pasión nacional al volver de Túnez...

Tuesday, September 05, 2006

Confirmado: no estoy paranoica!!!

La semana pasada me dio la impresión de que un tipo me seguía por la calle, aquí en Túnez. Como estaba por el centro (que no la Medina), le dí esquinazo metiéndome por callejuelas que conozco. Pero, la verdad, me quedé con complejo de culpa de lo mal pensada que soy, pero qué te has creído que te van a seguir a ti, etc., etc... como siempre, me cuesta creer la realidad cuando se acerca demasiado a la novela.

Pues bien, ayer ya no hubo duda. Otro tipo, calvo (con todo el cariño para los calvos guapos del mundo, que los hay) y con pinta de no haber roto un plato en su vida, es decir, nada por lo que sentirse orgullosa, me dio la impresión de que me seguía. Pero esta vez lo enfrenté. Y sí, sí, el tipo después de intentar colar que me había confundido con alguien, se ofrece a acompañarme (como si no lo hubiera ya estado haciendo), y cuando le suelto que ni hablar, me dice: "si quieres te doy mi número de teléfono". Increíble.

De manera, que hoy decidí ir del trabajo al hotel, porque estoy hasta el mismísimo remoño de Túnez, y de no tener NADA que conocer, que admirar, que descubrir... Pero no es penséis que una está segura en un hotel de 5 estrellas con guardas de seguridad a la puerta. El vigilante de la piscina, que se llama Amor, para más recochineo, también ha intentado ligar. Al menos, éste era guapo y joven, y nunca mejor dicho, chulopiscina. Y por qué no he aprovechado? Pues porque tooooodos los tunecinos que conozco (salvo Nabil, que es un santo varón) ligan como adolescentes miedosos, y se le baja a una la libido solo de pensar en intercambiar fluidos con un macho circuncidado con posiblemente poquísima experiencia y que sólo te ve como una perra vagina cristiana. Dónde ha ido a parar el refinamiento de Al-Andalus, que tanto admiran?

Ánimo, que sólo quedan tres días...

Sunday, September 03, 2006

Definitivamente, de cara es mucho mejor

Pues si, un cambio de actitud cuando lo ves todo negro puede ir muy bien... el trabajo me está entreteniendo, y las que iban a ser aburridas horas de ocio se acaban de animar con la participación de Waff, Ahmed y Tarek. Gracias, Nabil, por el contacto. Te has portado, campeón!!!!
Entre la piscina del hotel, Samarcande (un libro de Amin Maalouf, qué bien escribe el maldito!!) y la hospitalidad tunecina, me voy a reconciliar con la ciudad. Sigue sin haber opciones de ocio, al menos en un idioma que yo entienda, y conseguir una cerveza (con alcohol) fuera del hotel es prácticamente imposible, pero siempre hay un gato callejero que admirar. De hecho, ayer vi un gallo en plena Rue de Palestine, con espolones y todo. Nadie parecía darle la más mínima importancia, pero yo flipé por un tubo...
Por cierto, estoy haciendo el Ramadán antes de tiempo. Como no me apetece comer pizza, pannini, crêpes, brik, o platos a base de huevo, atún y alcaparras un día sí y otro también, paso del desayuno a la cena. Así no se me agotan tan pronto las opciones de menú, y de paso, hago dieta. Aunque lo compenso con pistachos, que se venden calentitos, y kaak al warka (pastelitos perfumados).